martes, 1 de julio de 2008

Elogio a un caudradísimo pesado


Tu cuadrado ser, peso al cuadrado,
tu peso pesado, tres pesos pesa.
Pesadez, gordura y pesos besa
tu cuadradismo del peso enamorado.

Los pesos te gustan y eres pesado;
Gordura, en pesado rezo, te reza
la raíz cuadrada de tu rareza
que sólo ve pesos, buen abogado.

Sos tan pesado cual el que taladre,
entre pesos y pesares bien cuadrados,
con palabras, el alma de las cosas.

Da pesos un mal perro que bien ladre,
ser molesto y los muchísimos asados,
las pesadeces que, en ti, son hermosas.

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